1/6/07

#1 The Strokes – Someday: La Canción de la Alegría.


Es raro. Sí, es raro que me gusten los días nublados y fríos, más que los días de fulminante sol. Es raro, pero esos días de inconsciente calor, aparte de convertirme en un ser no-pensante e inactivo, me ponen huraño. Es raro también que los días en los que logro mi paroxismo de felicidad se ubiquen, casualmente, en los días de otoño. ¡Nunca los días de invierno! Esos días de lluvia son los que arruinan la vida urbana. Los que a mí me cargan la batería, son esos día de frío y nubes, con las calles inundadas de hojarasca. La hojarasca me permite tener qué patear en mis largas caminatas, hacia donde sea e incluso hacia ninguna parte. Esas patadas que le propino a las hojas caídas me recuerdan la infancia. Todos pateábamos las hojas caídas, algunos lo seguimos haciendo y otros (los más) quieren hacerlo, pero un fiscalizador supremo los cohíbe: La Edad.

In many ways they'll miss the good old days
Someday, someday.

Muchos querían crecer, para hacer cosas de “grandes”. Cuando empezaron a ser grandes, fueron extrañando el ser “chicos”, evadir las tareas y, en fin, disfrutar, jugar y reír.

When we was young ah man did we have fun
Always, always.

Los que pudieron resistirse a coger esa manzana dorada del “crecimiento” y la “madurez”, prometieron jamás pasarse a ese oscuro lado de la seriedad y la inhibición social. Muchos mintieron, otros intentamos cumplir con la promesa.

Promises they break before they're made
Sometimes, sometimes.

Ahora, en un mundo de tantos serios, es necesario, para conservar la cultura lúdica y simple de la infancia, manejar ambos idiomas y adecuarse según corresponda a hablar con alguien “serio” o con alguien normal, que son los llamados “inmaduros”.
Dentro de tod esta vorágine de emociones y devociones, un escape que queda para volver a recordar La Promesa “peterpanesca” y para alegrar esos calurosos días, sólo una canción, La Canción de la Alegría: Someday.

No hay comentarios: